Logis Hotel, restaurant et spa Le Relais De Broceliande
Paimpont - 5, Rue Des Forges
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¿Quién no ha oído hablar alguna vez de la leyenda del Rey Arturo? Es entre estos páramos misteriosos, en el magnífico Bosque de Paimpont (también llamado Bosque de Brocéliande) donde nace uno de los mitos más famosos del mundo.
Este antiguo y misterioso bosque está impregnado de leyendas que giran en torno a las figuras mitológicas de Merlín, el Rey Arturo y los Caballeros de la Mesa Redonda. La belleza de estos bosques, con sus pequeños lagos, arroyos, rocas cubiertas de musgo y piedras de formas curiosas, enmarca los cuentos mágicos que siempre los han convertido en destino de peregrinación para los amantes del género y la fantasía. Un lugar mágico para descubrir durante hermosas excursiones.
El Bosque de Broceliande es un bosque legendario, imaginado por Chrétien de Troyes, escritor medieval que vivió a finales del siglo XII. En su novela artúrica El Caballero del León, inventó este bosque de las maravillas inspirándose en un lugar enclavado en el interior de Bretaña, un bosque conocido por sus leyendas y cuentos maravillosos. Hoy, el mito de este rincón mágico se perpetúa en el bosque de Paimpont.
En el corazón del bosque, oculta a las miradas indiscretas, se encuentra la Fuente de Barenton: sus grandes burbujas de nitrógeno dan la impresión de que la superficie de la fuente está hirviendo. A veces hay que esperar unos minutos para ver el fenómeno. En la antigüedad, a la fuente se le atribuían propiedades curativas y la eterna juventud.
La Fuente de Barenton es uno de los lugares más famosos del bosque. Cuenta la leyenda que fue aquí donde Merlín desencadenó tormentas eléctricas en un arcano ritual mágico. Incluso hoy se dice que si se vierte agua en los escalones de la fuente, se desatan al instante rayos y truenos. Y también en este lugar se dice que el mago Merlín conoció a Viviana, el hada.
En 1982, la excavación de este monumento megalítico reveló una estructura en forma de cuña alrededor de la tumba: mide casi 4 m de largo, 1 m de ancho y 1 m de alto.
La tumba, que data de la Edad del Bronce, es un cofre megalítico cuyas paredes están formadas por grandes bloques de esquisto rojo de más de 4 m de longitud cada uno. Rodeada antiguamente por un túmulo, la bóveda forma parte de un tipo de enterramiento que data de entre 2000 y 1500 a.C.
Originalmente, la tumba estaba coronada por otra losa que servía de cubierta y el conjunto pertenecía sin duda a una alineación preexistente de menhires.
Como todos los personajes de la mitología, Merlín es producto de un nacimiento extraordinario: de hecho, es hijo del diablo y de una joven pura. Figura legendaria, profeta y poseedor del conocimiento, Merlín aparece en la literatura del siglo XII en la Prophetia Merlini de Geoffrey de Monmouth. Sus características son conocidas en todo el mundo: druida, encantador, adivino, científico que domina el valor simbólico y curativo de las plantas e incluso rey de la metamorfosis, así como consejero íntimo del rey Arturo.
Antes de que la tumba de Merlín fuera parcialmente destruida en el siglo XIX, el monumento era un cementerio megalítico: un callejón de 12 metros de largo cubierto de esquisto rojo, que data del Neolítico. Hoy sólo quedan dos piedras.
Se trata de un yacimiento arqueológico religioso, cuyo nombre deriva de la leyenda Las Piedras Malditas de Tréhorenteuc.
Tras haber caído en el olvido durante años, enterrado bajo tojos, el monumento fue redescubierto entre 1983 y 1984 por el arqueólogo Jacques Briard y sus equipos. De forma trapezoidal, el Jardín de los Monjes mide 27 metros de lado norte y 23 metros de lado sur, y está formado por enormes bloques de cuarzo. El uso de piedras blancas es sin duda una elección simbólica y ritual: los estudios han demostrado que el monumento está vinculado a los yacimientos arqueológicos de Carnac.
No lejos de la Tumba de Merlín, se dice que esta fuente, rodeada de enormes piedras, era un lugar de culto druídico, vinculado al rito de la eterna juventud.
Según los eruditos, cada año los recién nacidos eran contados por los druidas durante el solsticio de verano, lavados en esta fuente e inscritos en el marith, el registro druídico. Los padres que no habían podido llevar a su hijo al rito iniciático lo inscribían al año siguiente. El niño era considerado entonces un infante y, en consecuencia, rejuvenecía, para el registro, un año. He aquí la explicación de la fuente de la juventud.
Este yacimiento neolítico consiste en una caja de 2,90 m de largo y 1,40 m de ancho, bordeada por doce losas de pizarra roja. Se han retirado las losas que originalmente cubrían el torso.
Este lugar también está vinculado a las leyendas artúricas, en particular a la figura de Viviana, hada del agua y Dama del Lago.
Debido a la increíble belleza de la naturaleza, te recomendamos la excursión al Valle sin Retorno donde, según la leyenda, Morgana, la hermanastra de Arturo, vivió entre magia y hechizos.
La ruta, de 4 kilómetros de longitud, es un sendero en bucle: podrás admirar algunos lugares considerados mágicos, como el estanque de las 7 hadas, donde cada árbol y cada roca parecen animados por una extraña atmósfera. Se dice que aún resuena aquí el lamento del gran mago Merlín, que eligió estos bosques como último refugio.
Aquí se encuentra también la Roca de los Falsos Amantes: según la leyenda, el hada Morgana, tras sorprender a su amante con otra mujer, en un arrebato de furia y rabia, petrificó a los dos amantes secretos.
Con 1.000 años de antigüedad y 9 metros de circunferencia, el Roble de Guillotin es una de las paradas ineludibles durante una visita al bosque de Paimpont.
Debe su nombre al abad Guillotin, sacerdote que, durante la Revolución Francesa, se refugió en el hueco de su tronco. Para salvaguardar el roble de los daños causados por el creciente flujo turístico, se han instalado pasarelas para proteger el tronco centenario.
El bosque no es la única atracción de la zona, tienes otras buenas razones para incluirla en tu itinerario.
Para todos aquellos, jóvenes y mayores, amantes de los cuentos de hadas y las leyendas mágicas, recomendamos una visita a la Puerta de los Secretos. Instalado en los antiguos edificios anexos a la Abadía de Paimpont, el recorrido expositivo de la Puerta de los Secretos es una inmersión sensorial y mágica en el universo del bosque de Brocéliande.
A lo largo del recorrido, unas instalaciones relatan los distintos aspectos del bosque: los cuentos y leyendas, la fauna, la flora, la historia de los artesanos del hierro y el metal y todos los pequeños seres traviesos que pueblan sus bosques, hadas, gnomos y elfos.
El pueblo de Paimpont, con sus casitas de granito y sus jardines floridos, es el punto de partida de casi cualquier excursión a pie o a caballo.
Con vistas a un estanque de casi 50 hectáreas, Paimpont es un pueblo pequeño y armonioso con un encanto reposado. Puedes caminar por un sendero pintoresco y muy poético, gracias a pasarelas sobre pilotes, para descubrir los páramos húmedos y un entorno natural poco común en Francia, la turbera.
Desgraciadamente, este pintoresco castillo no se puede visitar, ya que es privado, pero sin duda merece la pena hacer una parada por las encantadoras vistas de postal. De hecho, la mansión domina y se refleja en un pequeño lago.
Además, aislado al borde del bosque de Brocéliande, con sus piedras púrpuras y su aspecto lúgubre por la noche, el castillo siempre ha hecho cosquillas a la imaginación, con una terrorífica historia sobre el fantasma de la Dama Blanca: una misteriosa mujer enterrada viva en el jardín del castillo, cuyo espectro aún recorre la finca por la noche y que a menudo se aparece en los tejados del castillo en las noches de luna llena.
En el siguiente mapa puedes ver la ubicación de los principales lugares de interés de este artículo
El bosque de Brocéliande es muy extenso y los distintos puntos de interés están muy alejados entre sí. La mejor forma de visitarloes, sin duda, llegar en tu propio medio de transporte, para tener libertad de movimientos.
Si aterrizas en París, en los aeropuertos internacionales de París Orly, París-Charles de Gaulle o París Beauvais, puedes alquilar un coche directamente en el aeropuerto.
El bosque está aproximadamente a 55 minutos de Vannes (N166 más D724), a 1 hora 20 de Saint-Malo (D766) y a casi 4 horas de París (A11, A81, N24).
Si estás en París, puedes organizar una excursión en TGV hasta Rennes: en tres horas cubres los 350 km de distancia a los que hay que añadir el trayecto en autobús de la línea 1a (directo Rennes – Paimpont) con Breizhgo.
El pueblo de Paimpont es diminuto, pero en sus alrededores hay muchas opciones de alojamiento, de todos los tipos y presupuestos: hoteles, B&B, campings y albergues.
¿Qué tiempo hace en Bosque de Paimpont? A continuación se muestran las temperaturas y el pronóstico del tiempo en Bosque de Paimpont para los próximos días.
El bosque de Paimpont, también conocido como Broceliande, se encuentra en el municipio francés de Paimpont, cerca de la ciudad de Rennes.
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