
Guadalupe es un archipiélago de las Antillas Menores, perdido en el mar Caribe, formado por varias islas pequeñas: las principales son Basse-Terre y Grande-Terre, que juntas parecen las alas de una mariposa.
Encontrar el mejor lugar para alojarse en Guadalupe no es necesariamente fácil. La mejor ubicación varía en función de tu tipo de vacaciones, tu presupuesto y la duración de tu estancia.
Dependiendo de si prefieres pasar la mayor parte del tiempo relajándote en la playa, haciendo actividades acuáticas, visitas culturales o senderismo por la naturaleza y el bosque, la base adecuada no será la misma.
En cualquier caso, a menos que tengas intención de quedarte en un solo lugar durante toda tu estancia, te recomendamos encarecidamente que dispongas de un coche de alquiler. Esto te facilitará la vida y te permitirá descubrir todos los rincones de la isla.
Además, si quieres descubrir todos los aspectos de Guadalupe, y sobre todo si tu estancia dura más de una semana, lo mejor será probablemente alojarte en dos lugares distintos, para tener las mejores posibilidades de recorrer las 2 zonas principales de la isla.
Grande-Terre es la parte oriental de la isla principal de Guadalupe. Es la región más desarrollada y turística, principalmente porque es donde se encuentran las playas más bonitas de la isla , así como Pointe-à-Pitre y las ciudades más grandes, además de muchos de los parajes naturales más famosos.
Elegir alojarte en esta parte de Guadalupe te dará acceso a una gran variedad de actividades. En Pointe-à-Pitre, Sainte-Anne y Saint-François, tendrás la oportunidad de salir de fiesta en bares de ron y descubrir museos y monumentos. O relajarte en magníficas playas como la de Caravelle o la de Raisins Clairs, practicar submarinismo, kayak o senderismo.
Para encontrar alojamiento en esta parte de la isla, te aconsejamos que dirijas tu búsqueda hacia Sainte-Anne y Saint-François, dos ciudades muy animadas tanto de día como de noche.
Es la opción ideal para quienes desean estar en el corazón palpitante de la isla, con fácil acceso a restaurantes, tiendas y vida nocturna. La ciudad goza de una ubicación estratégica, ya que está cerca del aeropuerto internacional y del puerto principal. La zona del casco antiguo, con su arquitectura colonial, ofrece alojamiento en hoteles boutique con encanto de época.
Sainte-Anne es famosa por sus magníficas playas de arena blanca, incluida la renombrada Plage de la Caravelle. Es el destino perfecto para las familias, con aguas tranquilas y cristalinas ideales para nadar y bucear. El pueblo conserva un auténtico ambiente criollo, con un pintoresco mercado de artesanía y numerosos restaurantes de cocina local. El alojamiento abarca desde complejos con todo incluido hasta bonitas villas con vistas al mar, todas a poca distancia de la playa.
Saint-François es un paraíso para los amantes de los deportes acuáticos. El puerto deportivo ofrece excursiones en barco a las islas cercanas. La zona cuenta con algunos de los mejores resorts y villas de lujo de la isla, perfectos para quienes buscan unas vacaciones de confort y elegancia, gracias también a la presencia de un campo de golf de 18 hoyos de categoría mundial, lo que lo convierte en un destino exclusivo.
Basse-Terre es toda la parte occidental de la isla principal de Guadalupe. Esta región es especialmente conocida por su exuberante naturaleza y sus numerosas rutas de senderismo.
El sendero más popular te permitirá descubrir el volcán de la Soufrière, el pico más alto de las Antillas Menores. Está situado en el corazón del Parque Nacional de Guadalupe, donde podrás disfrutar de muchas otras actividades, como barranquismo o bicicleta de montaña.
Esta parte de la isla es mucho menos turística y menos agitada que Grande-Terre. Es especialmente adecuada para quienes buscan paz y tranquilidad, lejos de las multitudes y en contacto con la naturaleza. Aquí puedes descubrir una fauna y flora muy ricas, así como una hermosa diversidad de paisajes con bosques, plantaciones, playas, cascadas y montañas.
Las principales ciudades de esta parte de Guadalupe son Bouillante, Deshaies y Trois-Rivières. Deshaies y Bouillante son probablemente los mejores lugares para buscar alojamiento, ya que están tan bien situados que también puedes llegar rápidamente a Grande-Terre.
Situada en la costa oeste de Basse-Terre, Bouillante es un destino ideal para los amantes de la naturaleza y el submarinismo. La zona es famosa por sus aguas geotermales y la rica vida marina del Parque Nacional de Guadalupe. El alojamiento aquí es más íntimo y auténtico, con pequeños hoteles ecológicos y casas de vacaciones rodeadas de vegetación tropical. La ubicación es perfecta para explorar las rutas de senderismo por la selva tropical y las cascadas de los alrededores.
Este pintoresco pueblo pesquero de la costa noroeste ofrece un ambiente tranquilo y romántico. Deshaies conserva un encanto auténtico con su colorido puerto y sus playas solitarias. El alojamiento consiste principalmente en hoteles boutique y bungalows con vistas al mar, ideales para parejas que buscan intimidad. La proximidad al Jardín Botánico de Deshaies añade un plus a este complejo.
La zona ofrece alojamiento más barato que los complejos costeros más turísticos, con auténticos bed & breakfast regentados por familias locales. La ubicación es estratégica para visitar el volcán de La Soufrière y las cascadas de Carbet.
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